Las mujeres (y también los hombres) que practican Falun Gong han sido violadas sexualmente de forma sistematica por la policía y los agentes de la Oficina 6-10. Son violadas en público por agentes de policía, en la carcel de las cuelga boca abajo, o se las desnuda y arrojaen celdas ocupadas por criminales masculinos condenados. Esto ha dado lugar a violaciones en grupo, a que sean penetradas/os con palos de escoba o porras eléctricas causando hemorragias graves, o a ser torturadas/os aplicandoles compuestos peligrosos en los genitales.
“Durante la persecución, casi todos los genitales y pechos de las mujeres o los genitales de los hombres han sido violentados sexualmente de la manera más vulgar,” Gao escribió en una carta abierta en diciembre de 2005 a los líderes del Partido Comunista Chino.
En un informe de la Relatora Especial de las Naciones Unidas sobre la violencia contra la mujer se cita un caso de octubre de 2000, en el que 18 mujeres practicantes de Falun Gong fueron llevadas a la carcel y desnudadas y arrojadas a celdas en las que había hombres convictos. (número de documento de Naciones Unidas E/CN.4/2001/73/Add.1).
En la ciudad de Yonganli, un policía de paisano detuvo a una mujer que estaba colocando folletos de Falun Gong en los buzones. Dirigió sus manos a la parte inferior del cuerpo de la practicante con la excusa de llevar a cabo un registro corporal. Ella trató de huir pero no tuvo éxito. El policía la golpeó durante más de una hora, llevándola al borde de la muerte. Con los golpes, le arranco dos de sus dientes delanteros y provoco que perdiera el conocimiento. La arrastró bajo un puente, le arrancó los pantalones y la violó. Después de eso, introdujo la porra de goma en su vagina usando toda su fuerza y se sentó sobre ella. Cuando esta practicante recuperó la conciencia y un poco de fuerza, gritó tan fuerte como pudo pidiendo ayuda; el violador se marchó en su bicicleta.
- Mujeres de conciencia
Una carta grupal de mujeres chinas practicantes de Falun Gong resume lo que han sufrido: "El alambre de hierro ha sido usado para perforar nuestros pezones. La policía ha violado sexualmente nuestros cuerpos con berenjenas, cepillos de dientes y botellas de agua de plástico. En un campo de trabajo para mujeres en la provincia de Jilin, la policía insertó polvo de pimienta picante en las vaginas de las mujeres para obligarlas a abandonar su creencia y práctica de Falun Dafa."